El 27 de agosto de 2020 el acusado había sido detenido en su casa de Ezpeleta, partido de Quilmes, tras una investigación realizada por la UFI 5 del Departamento Judicial Morón, en virtud de la denuncia de la madre de una nena de 11 años a quien el acusado había engañado haciéndose pasar por su hijo de 12 años, pidiéndole fotos sexuales en la red TikTok. El jefe de la Policía Federal, Juan Carlos Hernández, lo exoneró de la fuerza.
Los hechos ocurrieron entre abril y agosto de 2020, en plena cuarentena por el Covid-19. De acuerdo a la investigación, el hombre pidió a la nena fotos, le envió fotos de sus genitales, hizo una videollamada donde no se veía la totalidad de su rostro, pero sí una característica fundamental por la cual luego fue reconocido, un lunar, y le pidió, insistentemente, encontrarse para mantener relaciones sexuales. Usó varios perfiles falsos -entre ellos el de su propio hijo-, en los que simuló tener 12 años, en las redes sociales TikTok e Instagram, por lo que quedó expuesto que la hija de la denunciante no sería la única víctima.
La condena por grooming detalla que el acusado fue condenado por ser autor de los delitos de captación de un menor por medio de comunicaciones electrónicas con el propósito de producir fotografías de sus partes genitales con fines predominantemente sexuales en concurso real con tenencia de representaciones de las partes genitales de una menor de 13 años de edad, los que a su vez concurren idealmente con corrupción de menores agravada por tratarse la víctima de una menor de 13 años de edad, perpetrados desde el lapso comprendido entre el mes de abril de 2020 y el día 23 de agosto de 2020 y el día 27 de agosto de 2020.
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