La investigación se inició luego de que una persona denunciara que la pareja comercializaba sustancias prohibidas en dos domicilios de esa localidad. Con la información suministrada se iniciaron las tareas de vigilancia e investigación en esos domicilios surgiendo así numerosas pruebas que dieron cuenta de la tarea ilícita que realizaban con la venta de cocaína y marihuana.

Esos elementos motivaron la concreción de un allanamiento en el domicilio de la pareja donde se secuestró droga y teléfonos celulares, en los cuales surge la interacción en el comercio de drogas, sumado a conversaciones con diversos clientes que les solicitaban estupefacientes, con quienes coordinaban las cantidades, su valor y el dinero que sus clientes le debían por esas transacciones.

Los integrantes de la pareja fueron condenados por los delitos de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización y comercialización de estupefacientes.