Según la causa, los hechos se produjeron entre 2012 y 2017 en un domicilio de Bahía Blanca, cuando una de las víctimas tenía entre 4 y 8 años de edad, y el hombre aprovechaba distintas circunstancias para someterla a una serie de abusos.

Además, entre 2018 y 2019, el acusado le efectuó tocamientos a otra niña, quien tenía entre 12 y 13 años de edad, en diferentes y reiteradas oportunidades.

Los jueces computaron como agravantes la diferencia de edad entre el imputado y las dos niñas víctimas, el daño psicológico que les provocó y las condiciones personales del procesado, quien se desempeñaba como militar.

El imputado fue condenado por los delitos de abuso sexual gravemente ultrajante y abuso sexual con acceso carnal, en perjuicio de una de las víctimas, y abuso sexual gravemente ultrajante reiterado, en relación a la otra niña.