El 24 de enero, en la previa del partido entre Barracas Central y Racing Club de Avellaneda por la Liga Profesional de Fútbol, se registró un enfrentamiento entre simpatizantes del equipo local en el estadio de Arsenal de Sarandí.

Durante el ingreso de la hinchada local, en la intersección de las calles Pasco y Estrada, un grupo de simpatizantes comenzó a confrontar entre sí y a arrojar piedras y otros elementos contundentes. Los enfrentamientos también incluyeron agresiones al personal policial de Infantería que se encontraba en la zona para garantizar la seguridad.  

Uno de los objetos arrojados impactó en la ceja izquierda de un sargento del Comando Avellaneda, provocándole un corte menor. Para disuadir la situación y prevenir mayores desmanes, el personal policial realizó detonaciones con postas de goma, logrando dispersar a los involucrados.  

No se registraron detenciones en el lugar. La Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N.° 4 tomó intervención en el caso y dispuso actuaciones por "atentado a la autoridad".