El pasado 7 de septiembre de 2025, personal policial de la Comisaría 7.ª de Avellaneda intervino a raíz de un llamado al 911 que alertaba sobre la presencia de un hombre tendido en la vía pública, en inmediaciones de Centenario Uruguayo entre Casacuberta y De La Serna.
Al arribar al lugar, los efectivos constataron que el individuo se hallaba sin vida, presentando lesiones visibles y manchas hemáticas en la zona del rostro. Una ambulancia del SAME corroboró el deceso. Posteriormente, personal de Policía Científica y la médica forense Dra. Blanco efectuaron la pericia correspondiente, verificando que el cuerpo presentaba dos orificios compatibles con proyectiles de arma de fuego, uno en el tórax y otro en la cabeza.
La UFI n.° 3 de Avellaneda – a cargo del Dr. Laborde dispuso la instrucción de la causa bajo la carátula de “Homicidio”, ordenando las diligencias de rigor y el traslado del cuerpo a la Morgue Judicial de Lomas de Zamora.
El fallecido atravesaba problemas de adicciones de larga data y se encontraba en situación de calle. Un familiar directo lo reconoció en el lugar. Según surge de las primeras averiguaciones, la víctima había sido investigada en el marco de la IPP 20-00-016181-24, tramitada ante la UFI n.° 4 de Avellaneda, en una pesquisa por comercialización de estupefacientes que motivó un allanamiento en septiembre de 2024, sin hallársele entonces en el domicilio.
La instrucción en curso procura determinar las circunstancias del hecho, en el que las primeras hipótesis refieren a una riña que habría culminado con el deceso.
El pasado 7 de septiembre de 2025, personal policial de la Comisaría 7.ª de Avellaneda intervino a raíz de un llamado al 911 que alertaba sobre la presencia de un hombre tendido en la vía pública, en inmediaciones de Centenario Uruguayo entre Casacuberta y De La Serna.
Al arribar al lugar, los efectivos constataron que el individuo se hallaba sin vida, presentando lesiones visibles y manchas hemáticas en la zona del rostro. Una ambulancia del SAME corroboró el deceso. Posteriormente, personal de Policía Científica y la médica forense Dra. Blanco efectuaron la pericia correspondiente, verificando que el cuerpo presentaba dos orificios compatibles con proyectiles de arma de fuego, uno en el tórax y otro en la cabeza.
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CIJur - Centro de Información Jurídica del MPBA
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